Daños previos al expolio de junio-2007.
Se presentaron frecuentes dificultades causadas por los desprendimientos de rocas y problemas para obtener la propiedad de gran parte del terreno sobre el que se tenía que pasar el ferrocarril. De acuerdo con el decreto que autorizó la venta de las minas, tenían los compradores de ellas el derecho de expropiación forzosa sobre las tierras que necesitasen para el ferrocarril. Pero la presentación de recursos ante los tribunales españolres alargaba los plazos, y la compañía prefirió abonar indemnizaciones más generosas de las que hubieran sido necesarias con la expropiación, para llevar al mímino las demoras. Cuando el acuerdo con un propietario era completamente imposible, Bruce se anticipaba a la sentencia del tribunal ante el que actuaban los respresentates legales de la compañía y tiraba por la calle de en medio construyendo la línea a pesar de las airadas protestas del dueño del terreno.AVERY, D. (1985) “Nunca en el cumpleaños de la Reina Victoria. Historia de las minas de Río Tinto”. Labor, Barcelona.
Situaciones como esta se dieron en los términos de La Palma del Condado y Villarrasa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario