Ahora, sólo balastro.

La contemplación de esta primera vía ferrea en construcción por tierras palmerinas fue, en estos primeros comienzos, privilegio de los agricultores palmerinos que trabajaban en parajes limítrofes con los de Villarrasa y Niebla. Aquella gran novedad (de la que ellos fueron sus primeros testigos paulatinos en la población) pronto se difundió como reguero de pólvora por todos los sectores de La Palma, a donde acudían con frecuencia a pernoctar, divertirse o medrar no pocos operarios de fuera empleados en las obras del ferrocarril. A veces esta masiva concurrencia de obreros eventuales llegó incluso a perturbar el orden en la localidad, lo que obligó a la Alcaldía a publicar varios bandos y edictos en prevención de ...

RAMÍREZ CEPEDA, M. (1993). La gestación de un ferrocarril en La Palma del Condado. Asociación cultural Amigos de La Palma.